Requieren una licencia de apertura formal, con aprobación municipal y, en la mayoría de los casos, inspección previa.
Se trata de locales cuya actividad puede suponer riesgos para la salud pública, el medio ambiente o la seguridad, o generar molestias como ruido, residuos o emisiones.
Documentación habitual necesaria:
- Proyecto técnico elaborado y firmado por un profesional competente
- Solicitud y tramitación de la licencia ante el Ayuntamiento
- Inspecciones técnicas por parte de los servicios municipales
- Informes sectoriales cuando corresponda (sanidad, medio ambiente, etc.)